Al comprar un camión, es recomendable que te percates de que todo funcione adecuadamente. Para esto, es necesario conocer la funcionalidad del velocímetro. Este es un instrumento que indica la velocidad del vehículo. Generalmente funciona en simultáneo con un dispositivo conocido como odómetro, el cual registra la distancia recorrida.

Esto quiere decir que si recorres 200 kilómetros y tardas cuatro horas en realizarlo, tu velocidad media es de 50 kilómetros por hora. Aun así, lo que necesitas saber exactamente es a qué rapidez vas en base al momento dado. No obstante, esto tiende a ser más difícil de lo que se cree a menos que conozcas los movimientos de rotación de los neumáticos de tu camión. Para este tipo de contextos, el velocímetro funciona perfectamente. Sigue leyendo el siguiente artículo para conocer más del tema.

¿Qué es un velocímetro?

Como se mencionó anteriormente, un velocímetro es el dispositivo de un vehículo que mide y muestra la velocidad. Es esencial para fines de seguridad en carreteras y autopistas. Esto debido a que le dice al conductor qué tan rápido se mueve el camión en un momento dado, midiendo instantáneamente la velocidad en el suelo.

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¿Cómo funciona un velocímetro?

Los velocímetros miden la velocidad de un camión al estar vinculados mecánicamente con el eje de salida de la caja de cambios. De esta manera, la velocidad con la que gira es independiente de los cambios de marcha y, por lo tanto, proporciona una medida real de la velocidad de la carretera.

Dentro de la caja de cambios, el eje de salida contiene una rueda dentada que gira en simultáneo. Vinculado a esta rueda dentada, e impulsado por ella, hay un pequeño engranaje de piñón, el cual se enlaza con el cable del velocímetro. A medida que gira el piñón, impulsado por el eje de salida de la caja de engranajes, hace que el cable gire con él.

El otro extremo del cable encaja en un eje de transmisión. En el extremo de este eje hay un imán. Cerca, hay un tambor de metal en forma de copa que se adjunta a la aguja y da la lectura en el dial. El imán hace que una aguja se mueve alrededor de una esfera circular, haciendo que el tambor haga lo mismo.

Cuanto más rápido se desplaza el camión, mayor es la atracción del imán sobre el tambor de metal y más se mueve la aguja alrededor del dial.

¿Qué tan exacto es el velocímetro?

Ningún velocímetro puede ser perfectamente preciso. Por ejemplo, es probable que la velocidad medida cambie ligeramente de la real si los neumáticos no tienen la presión correcta o en caso de que se desgasten.

Entonces, por razones de seguridad, la ley requiere que los velocímetros sean precisos dentro de un rango de velocidades. No debe leer más lento que la velocidad real del camión en la carretera y está permitido dar porcentajes de hasta un 10 por ciento más por 3 kilómetros.

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¿Cuáles son los diferentes tipos de velocímetros?

Existen dos tipos de velocímetros. Estos son los siguientes:

Velocímetros mecánicos

Otto Schulze, un inventor de Estrasburgo, presentó la primera patente para el velocímetro mecánico en 1902. El invento permitió a los conductores determinar exactamente qué tan rápido viajaban y realizar los ajustes correspondientes. Al mismo tiempo, muchos países establecieron límites de velocidad y utilizaron policías para hacerlos cumplir.

Velocímetros electrónicos

Los velocímetros electrónicos funcionan de una manera completamente diferente. Los imanes conectados al eje de transmisión giratorio del vehículo pasan por pequeños sensores magnéticos ubicados cerca.

Cada vez que los imanes pasan por estos, generan un breve pulso de corriente eléctrica. Un circuito electrónico cuenta la rapidez con la que llegan los pulsos y lo convierte en velocidad, que se muestra electrónicamente en una pantalla LCD. Asimismo, puede llevar un recuento de la distancia que has viajado, cumpliendo la función de un odómetro.

Son más confiables y compactos que los mecánicos y los sensores de movimiento pueden estar a cualquier distancia de la pantalla que muestra la velocidad, lo que los hace adecuados para cualquier tipo de vehículo, desde una bicicleta hasta un camión de 40 toneladas.

Conocer la velocidad a la que estás manejando tu camión evitará futuros accidentes vehiculares. De igual manera, permitirá que puedas contar con un mejor sistema de mantenimiento.

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Al comprar un camión, es necesario que pienses en cómo llevar a cabo el sistema de engrasado. Cuando piensas en el mantenimiento regular de tu vehículo, ¿qué es lo primero que viene a tu mente? Cambios de aceite, afinaciones, alteraciones en los filtros de aire y de combustible y mejorar el control de los neumáticos y frenos.

Uno de los aspectos más comúnmente ignorados del mantenimiento de un camión es el engrasado. Engrasar este vehículo es muy importante, ya que la lubricación de las piezas móviles aumenta su vida útil y reduce el desgaste. Si no las mantienes engrasadas, podrían tener que someterse a reparaciones muy costosas y que requieran mucho tiempo.

Para evitar esta serie de problemas, en Fuso te brindamos 5 consejos para aprender a engrasar un camión. Sigue leyendo el siguiente artículo para saber más del tema.

1. Ten en cuenta qué piezas móviles debes revisar

Antes de empezar el proceso de la lubricación de un camión, ten en cuenta qué piezas móviles debes revisar. Generalmente, estas son las rótulas, en donde se conectan los brazos de control, las varillas de unión y la articulación de la dirección.

Estas áreas deben revisarse y engrasarse cada vez que cambies el aceite o en caso de que el camión sea conducido por carreteras llenas de lodo. Si no están correctamente lubricadas, la vida útil del camión será reducida.

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2. Verifica si el camión realmente necesita lubricación

Verificar si un camión necesita lubricación es un proceso bastante sencillo. Primero debes ponerte debajo del vehículo y buscar las partes antes mencionadas. Una vez que las hayas localizado, asegúrate de que estas piezas contienen lubricante.

Recuerda que la grasa no dura para siempre. A menudo, se seca y puede llegar a desgastarse. Para evitar que esto suceda, realiza este procedimiento cada vez que lo encuentres oportuno.

3. Ten en cuenta cómo engrasar el camión

Aplicar grasa a estas áreas es simple y fácil. Simplemente carga una pistola engrasadora, presiona la punta en la parte superior de las piezas y aplica el lubricante. Sabrás cuando tiene suficiente cuando veas que la grasa comienza a sobresalir por un lado.

Mantener tu camión debidamente engrasado es una de las formas más fáciles de aumentar su longevidad. Muchas personas lo pasan por alto con mucha frecuencia, pero es muy importante para el mantenimiento de tu vehículo.

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4. Considera el espesor del lubricante

Es necesario que tomes en consideración el espesor del lubricante. La grasa normal solo contiene aceite como base. Adicionalmente, se le agrega espesantes con el fin de otorgarle diferentes características. Estos pueden ser jabones metálicos, arcillas bentoníticas, poliureas o espesantes inorgánicos y son añadidos con el fin de que el lubricante pueda soportar temperaturas mucho más altas.

Cabe mencionar que no todos los lubricantes son compatibles entre sí. Algunos, al mezclarse, pueden provocar fallas en la eficiencia del camión. Evita combinarlos si presentan aluminio, arcilla o sílice.

Del mismo modo, asegúrate de no engrasar las piezas móviles de un camión con un lubricante que no sea el adecuado. En caso de que sea muy viscoso, fluirá con mucha facilidad, pero no evitará que las partes metálicas se rocen entre sí. Por el contrario, si es demasiado espeso, el rendimiento será menor.

5. No engrases las piezas móviles en exceso

Cuando se trata de engrasar las piezas móviles de un camión, debes tomar en cuenta que la lubricación excesiva puede ser contraproducente. El engrasado debe establecerse en base a cálculos adecuados, utilizados para determinar la cantidad de grasa necesaria para mejorar la eficiencia de tu vehículo.

El sobreengrasado puede provocar que el camión se vea expuesto a altas temperaturas, lo que podría reducir su potencia y funcionamiento. En caso de motores eléctricos engrasados, estos podrían sufrir pérdidas de energía. Las mejores formas de evitar estos problemas son establecer un programa de mantenimiento y utilizar cálculos para determinar la cantidad correcta de lubricante.

Asegúrate de mantener un correcto cuidado de tu camión. Es importante que la lubricación sea realizada adecuadamente. De lo contrario, lo más probable es que tu vehículo presente fallas, tanto en el motor como en otras piezas móviles. En caso de problemas de este tipo, es necesario que acudas con un especialista.

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Al comprar un camión, es recomendable que conozcas su funcionamiento. Esto con el fin de evitar problemas. Uno de los elementos a los que debes prestar mayor atención es el combustible. Específicamente, al consumo del mismo.

Generalmente, las clasificaciones de consumo de combustible te brindan la información necesaria sobre la eficiencia del vehículo. Por ejemplo, cuanto más carburante quema un camión, más gases de efecto invernadero produce. Específicamente, por cada litro de combustible, genera alrededor de 2,3 kilogramos de dióxido de carbono. Incluso si no es directamente perjudicial para nuestra salud, las emisiones de CO2 contribuyen al cambio climático.

Asimismo, para dar con una cantidad estimada del consumo de carburante, se deben tomar en cuenta diversos factores que afectan el rendimiento y conducción del vehículo. Por esta razón, se usan medidas estándares. Sigue leyendo el siguiente artículo para saber más de este tema.

¿Qué debes entender sobre el consumo de combustible de un camión?

Como se mencionó anteriormente, las clasificaciones de consumo de combustible te brindan información sobre la eficiencia del vehículo. Asimismo, te ayudan a comparar el uso de carburante de cada camión. No obstante, es imposible que las pruebas y procedimientos de laboratorio simulen todas las condiciones que pueden experimentar los conductores.

Lo que debes entender sobre el consumo de combustible de un camión es que este variará dependiendo de cómo, cuándo y dónde los conduzcas. Los siguientes factores afectan la cantidad de carburante a usar:

• La manera en la que aceleras.
• Qué tan rápido conduces.
• La edad y el estado del vehículo.
• La temperatura y el clima.
• Las condiciones del tráfico y las carreteras.
• El uso de aire acondicionado y otros accesorios eléctricos.

De igual manera, puede haber diferencias de consumo de combustible en la misma marca y modelo debido a pequeñas variaciones en la fabricación de vehículos.

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¿Cuál es el consumo de combustible de un camión por kilómetro?

Como era de esperarse, el consumo de combustible por kilómetro depende del tamaño y carga de cada camión, así como de si sueles conducirlos por entornos urbanos o interurbanos. Aun así, se estima que el uso de carburante puede ser de unos treinta a cuarenta litros por cada cien kilómetros.

Para camiones más grandes con una carga útil de alrededor de 23.500 kg, el consumo puede aumentar hasta 38 litros por cada 100 kilómetros. Los vehículos más pequeños y los de menor carga consumen menos. Por ejemplo, un camión más pequeño utiliza alrededor de 25 litros.

¿Cómo puedes ahorrar combustible al conducir un camión?

La conducción responsable facilita el ahorro de combustible, además de mejorar la seguridad vial y prevenir el desgaste de tu camión. Adopta estas técnicas de conducción para reducir el uso de carburante y las emisiones de CO2 del vehículo:

 

Acelera suavemente

 

Cuanto más aceleras, más combustible consumes. Si estás manejando en la ciudad, puedes reducir el uso de carburante presionando el acelerador suavemente. Esto evitará que tu camión sufra desgastes mayores en un futuro.

Cabe destacar que la aceleración precipitada podría conllevar a accidentes que atenten contra tu salud. Para este tipo de situaciones, lo más recomendable es seguir este procedimiento de manera cuidadosa y responsable.

 

Mantén una velocidad constante

 

Cuando aumentas o disminuyes la velocidad constantemente, tu camión puede llegar a deteriorarse más rápido. A su vez, se ha demostrado que este mal hábito puede aumentar el uso de combustible en un 20%

 

Anticípate al tráfico

 

Mira hacia adelante mientras conduces para ver lo que se avecina en el camino. Además, mantén una distancia adecuada entre los demás vehículos que se encuentran a tu lado. Este hábito no solo evitará que el combustible se use de manera excesiva, también te proporciona mayor seguridad. Al mantener la vista despejada, podrás evitar todo tipo de accidentes de conducción.

El consumo adecuado del combustible debe ser una de las mayores preocupaciones al momento de manejar un camión. En caso de que el uso de carburantes sea excesivo, tu vehículo podría llegar a desgastarse más rápido. En otras palabras, su eficiencia y rendimiento será menor. Esto podría conllevar a que su mantenimiento sea mucho más costoso.

Al saber cuánta es la cantidad de combustible estimada según el tipo de carga y tamaño de tu camión, podrás disponer de un mejor consumo del mismo.

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Al comprar un camión, es importante procurar que todo funcione correctamente. Especialmente el motor de arranque. Este es uno de los principales inventos para aplicaciones de control de motores. Como sugiere el nombre, es un dispositivo eléctrico que controla la energía de arranque de un vehículo. También se utiliza con el propósito de detener, invertir y proteger motores eléctricos.

Generalmente, se compone de dos elementos, el contactor y el relé de sobrecarga. El primero se usa con el fin de controlar la corriente eléctrica, conectando o desconectando la alimentación del circuito. Por el contrario, el segundo evita que el motor se queme y se vuelva inútil con el tiempo. Lo protege y reduce cualquier peligro potencial.

Con el fin de que sepas más sobre el funcionamiento de esta herramienta, en Fuso te explicamos más al respecto.

¿Cuál es el propósito de un motor de arranque?

Como mencionamos antes, el motor de arranque protege y controla la energía de un camión. La herramienta logra esto de dos maneras y, por lo tanto, proporciona una solución doble. Básicamente, se utiliza para mitigar y prevenir sobrecargas eléctricas. Estas pueden presentar riesgos graves tanto para el vehículo como para la salud de los empleados. Suelen suceder debido a las siguientes razones:

• El clima
• La salida de carga inicial del motor al momento de arrancar
• Cambios repentinos en el uso de electricidad dentro de tus instalaciones
• Complicaciones eléctricas no diagnosticadas

Un motor de arranque proporciona defensa al controlar primero la salida eléctrica del vehículo en su punto inicial de operación. A partir de ese momento, continúa protegiendo su sistema, operando a prueba de fallas.

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¿Tienes que contar con un motor de arranque en tu camión?

Todo el equipo requiere una medida de seguridad de algún tipo. Sin embargo, el hecho de que requiera de un motor de arranque depende de una variedad de factores. En muchos casos, se prescinde de esta herramienta y, en su lugar, se utiliza un interruptor de desconexión. Por otro lado, en otro tipo de situaciones, este dispositivo puede ser tu mejor o única opción.

¿Cuáles son los tipos de motores de arranque?

Existe una amplia gama de motores de arranque, muchos de los cuales funcionan de manera diferente o se utilizan en circunstancias más específicas y exigentes. Para determinar tus necesidades exactas, te recomendamos que hables con un profesional de gestión eléctrica designado. Específicamente, los tipos son los siguientes:

Motores de arranque manuales

Estos son dispositivos que se operan manualmente. Asimismo, son extremadamente fáciles y sencillos de operar y no requieren la intervención de un experto. El motor de arranque manual incluye un botón que permite al usuario encender o apagar el equipo conectado.

A su vez, este cuenta con enlaces mecánicos, que hacen que el vehículo arranque o se detenga. Las siguientes características de esta herramienta lo convierten en una opción adecuada:

• Ofrecen una operación segura y económica
• El tamaño compacto de estos dispositivos los hace adecuados para una amplia gama de aplicaciones
• Proporcionan protección contra sobrecargas al motor, protegiéndolo de cualquier daño potencial
• El costo es relativamente bajo

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Motores de arranque magnéticos

Este es otro tipo de motor de arranque, el cual funciona electromagnéticamente. Significa que la carga del motor conectada a este dispositivo generalmente se inicia y se detiene usando un voltaje más bajo y más seguro. Al igual que otros, el magnético también tiene un contactor eléctrico y un relé de sobrecarga para proteger el vehículo de una posible sobrecarga o sobrecalentamiento.

¿Cuáles son los circuitos dentro de un motor de arranque?

Hay dos circuitos en un motor de arranque. Estos son los siguientes:

Circuito de alimentación

El circuito de alimentación transmite la electricidad a través del motor de arranque y el relé de sobrecarga. La corriente es transportada por los contactos de potencia principales del contactor.

Circuito de control

Este opera el contactor para encenderlo o apagarlo. Asimismo, es responsable de permitir o interrumpir el flujo de corriente del motor de un camión. Para hacer esto, los contactos en el circuito de control se abren o se cierran.

Energiza la bobina del contactor, lo que crea un campo electromagnético. Puede derivar la energía de cualquiera de las siguientes tres formas:

Control común

Este tipo de control se da cuando la fuente de alimentación del circuito de control es la misma que la del motor.

Control separado

Este es el tipo de control más popular. Como sugiere el nombre, obtiene energía de una fuente aparte. Generalmente, la electricidad derivada es de menor voltaje en comparación con la fuente de energía del motor.

Control de transformador

Este obtiene energía del transformador del circuito de control. Generalmente, la electricidad derivada es de menor voltaje en comparación con la fuente de energía del motor.

Es necesario conocer más sobre la función del motor de arranque con el fin de evitar problemas de sobrecarga o sobrecalentamiento en el camión. Conociendo más sobre este, podrás llevar un mejor mantenimiento de tu vehículo.

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Al comprar un camión, es necesario que tomes en cuenta las transmisiones. Generalmente, estas son manuales o mecánicas. Las segundas implican el uso de diferentes tipos de sistemas para transferir energía de un componente a otro sin cambiar su naturaleza.

Cuando el movimiento proveniente de un componente mecánico de conducción se transfiere a otro sin cambiar, estaremos hablando de una transmisión de potencia. En este tipo de procedimiento, el integrante móvil transfiere la energía al receptor. Estos dos pueden estar en contacto directo, pero la potencia también se puede transmitir a través de un elemento intermedio.

Con el fin de que conozcas mejor sobre este tipo de transmisión, en el siguiente artículo te explicamos mejor la razón por la que es necesaria y cuáles son los tipos de sistemas asociados a este.

¿Por qué es necesaria la transmisión de potencia mecánica?

Hay muchas formas de generar energía. No obstante, a veces es imposible originarla en el momento en el que se necesita o en la forma, dirección o magnitud adecuada. Por lo tanto, las transmisiones de potencia mecánica son vitales en esta clase de procesos. Generalmente, esta se utiliza por las siguientes razones:

• La potencia o la energía generada pueden ser empleadas y convertidas de forma útil.
• Las restricciones físicas limitan el origen de la potencia. Con la transmisión de potencia mecánica, la energía puede ser transferida sin problemas.
• Puede ser usada para cambiar la dirección y magnitud.
• Con ella, puedes invertir el tipo de energía. Es decir, pasar de rotación a lineal y viceversa.

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¿Cuáles son los tipos de transmisiones mecánicas?

Existen diversos tipos de transmisiones mecánicas. Entre estos, se encuentran los siguientes:

Engranajes

Un sistema de engranajes está compuesto por dos o más ruedas dentadas que se conectan e interactúan entre sí. Este transmite un movimiento giratorio entre piezas poco espaciadas.

Existen diferentes clases de engranajes, como el de espiga, helicoidales, cónicos y de corte recto. La manera en la que cada uno trabaja depende, en gran medida, de la posición en la que estén ubicados. Esta determina la orientación y precisión de sus procesos.

Por lo general, son reversibles y te permite variar la velocidad de rotación. No obstante, es posible que presenten algunos problemas. Por ejemplo, al momento de transmitir la energía, es posible que generen ruido y vibraciones. Asimismo, requieren lubricación constante y un ajuste mucho más preciso, ya que son sensibles a las impurezas.

Sistemas de transmisión por cadena

En este sistema, un movimiento de rotación se transmite de una rueda dentada a otra a cierta distancia a través de una cadena. A su vez, es impulsado por eslabones que se entrelazan con los dientes de la rueda dentada. Los dos piñones son el componente móvil y el componente receptor, mientras que la cadena es el componente intermedio.

El movimiento originado por este tipo de transmisión es reversible y la velocidad puede ser cambiada ajustando los parámetros de las ruedas. Sin embargo, durante sus procedimientos, es posible que generen ruido y vibraciones. De igual manera, es necesario que lubriques y reajustes adecuadamente la cadena.

En cuanto a la velocidad de rotación de las ruedas, es necesario recalcar que esta debe limitarse para evitar descarrilar la cadena.

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Ruedas de fricción

Este sistema está formado por dos o más ruedas que están en contacto entre sí y transmiten un movimiento giratorio a través de la fricción. En este tipo de procedimientos, la dirección de rotación cambia de una rueda a la siguiente, generando un movimiento reversible.

Asimismo, la velocidad puede ser reajustada de ser necesario. Es necesario que esté adecuadamente limpio. De lo contrario, es posible que llegue a degradarse debido a la suciedad y escombros.

Sistemas de correas y poleas

Este sistema está compuesto por una polea que gira y tira de la correa, que a su vez transmite el movimiento a una segunda polea. Depende, en gran medida, de la adherencia y la fricción entre los componentes para transmitir el movimiento giratorio, el cual generalmente es reversible.

Es necesario que ajustes adecuadamente las correas, ya que podrían desprenderse de las poleas. De igual manera, es recomendable que las mantengas limpias siempre. Recuerda que su vida útil es limitada.

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Saber los tipos de transmisiones mecánicas te permitirá tener una mejor noción de la manera en la que tus camiones generan energía. Recuerda que es necesario que mantengas cada sistema correctamente limpio para evitar accidentes.

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Al comprar un camión, es necesario verificar que todo funcione correctamente, sobre todo si cuenta con un motor diésel. Generalmente, este se caracteriza por ser el poder detrás de todo tipo de vehículo pesado, como los camiones, trenes, barcos y submarinos. A primera vista, es posible que sea similar al motor de gasolina convencional. No obstante, es capaz de generar mucha más potencia, lo que ayuda a que la maquinaria funcione de una manera más eficiente y sutilmente diferente.

Con este fin, en Fuso te proporcionamos una serie de detalles en base a su funcionamiento. Sigue leyendo el siguiente artículo para saber más del tema.

¿Qué es un motor diésel?

Este es un tipo de motor de combustión interna que, al encenderse por compresión, convierte la potencia del combustible diésel en energía mecánica rotativa. Lleva su nombre por el inventor Rudolf Diesel, quien nació en París en 1858. En 1893, creó el primer prototipo del motor diesel. Originalmente, fue diseñado para funcionar con aceite de maní.

Asimismo, funciona mediante el uso de pistones para comprimir una mezcla de aire con combustible diesel. Cuando el oxígeno se comprime, la mezcla explota obligando al pistón a retroceder y creando un movimiento alternativo. Posteriormente, este se convierte en movimiento rotatorio.

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¿Cuáles son los componentes del motor diésel?

Los componentes del motor diésel son los siguientes:

Sistema de combustible

El sistema de combustible incluye la bomba de inyección de combustible, la de elevación, los inyectores y todas las tuberías. En ocasiones, también habrá algunos filtros y un separador de agua que evita que el carburante de mala calidad dañe tu camión.

Sistema de lubricación

El sistema de lubricación mantiene tu motor funcionando sin problemas, evitando que las partes móviles se desgasten al usar el aceite a presión para lubricar y reducir la fricción.

Sistema de enfriamiento

El sistema de enfriamiento se encarga del refrigerante del motor, el cual consta de una mezcla de agua destilada y glicol con algunos aditivos adicionales para ayudar a prevenir la corrosión.

Sistema de escape

El sistema de escape se deshace del gas de combustión residual. Ten en cuenta que es muy importante retirarlo de los cilindros del motor a través del colector de escape.

Turbocompresor

Este dispositivo comprime el aire de combustión para hacer que el motor sea más potente.

¿Cómo funciona un motor diésel?

La funcionalidad está relacionada con los tiempos de los motores. Para esto, existen dos tipos de funcionamientos:

Funcionamiento para motores de cuatro tiempos

Como un motor de gasolina, un motor diésel generalmente opera repitiendo un ciclo de cuatro etapas o carreras, durante el cual el pistón se mueve hacia arriba y abajo dos veces durante el ciclo. Cada etapa se define de la siguiente manera:

Admisión

En esta, el aire ingresa al cilindro a través de la válvula de entrada a medida que el pistón desciende.

Compresión

En esta etapa, la válvula de entrada se cierra, el pistón se mueve hacia arriba y comprime la mezcla de aire calentándola. Se introduce combustible en el gas caliente a través de la válvula de inyección y se enciende espontáneamente. A diferencia de un motor de gasolina, no se necesita una bujía para que esto suceda.

Potencia

A medida que la mezcla de aire y combustible se enciende y se quema, empuja el pistón hacia abajo, impulsando el cigüeñal. Este envía potencia a las ruedas.

Escape

La válvula de salida se abre para eliminar los gases de escape.

Motores de dos tiempos

En un diésel de dos tiempos, el ciclo completo ocurre cuando el pistón se mueve hacia arriba y abajo solo una vez. A pesar de esto, existen tres etapas:

Escape y admisión

En esta etapa, el aire es introducido hacia un lado del cilindro. Posteriormente, empuja el escape viejo hacia afuera a través de las válvulas ubicadas en la parte superior.

Compresión

Las válvulas de admisión y escape se cierran. El pistón sube, comprime el aire y lo calienta. Cuando este alcanza la parte superior del cilindro, se inyecta combustible y se enciende espontáneamente.

Potencia

A medida que la mezcla de aire y combustible se enciende, empuja el pistón hacia abajo, impulsando el cigüeñal que envía potencia a las ruedas.

Es importante recalcar que los motores de dos tiempos son más pequeños y ligeros que los de cuatro tiempos. De igual manera, tienden a ser más eficientes, ya que producen energía una vez durante cada rotación. Esto significa que necesitan más refrigeración y lubricación.

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¿Qué hace que un camión diésel sea diferente a uno convencional?

Lo que hace que los camiones diésel sean diferentes de los de gasolina se reduce al combustible. Si bien tanto el diésel como la gasolina provienen del petróleo crudo, tienen propiedades muy diferentes.

Tanto el encendido de los camiones diésel como los de gasolina arrancan de la misma manera. Las válvulas se abren para dejar entrar aire, se inyecta combustible y se eleva un pistón para comprimir la mezcla entre este y el aire. Es en este punto donde entran en juego las diferencias.

Un motor de gasolina requiere una bujía para encender la mezcla de aire y combustible y producir energía. El diésel lo hace solo por medio de la compresión.

Es importante conocer el funcionamiento exacto de un motor diésel para evitar cualquier tipo de accidente o deterioro con el tiempo. Recuerda que el cuidado de tu camión depende únicamente de ti.

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Al comprar un camión, es necesario comprobar que todo funcione correctamente. De lo contrario, es posible que puedas presentar problemas a medida que lo conduzcas. Generalmente, las luces del tablero de instrumentos indican a primera vista que algo anda mal en estos vehículos. Aquellos que exhiban estos problemas deben ser llevados a un taller autorizado para una pronta revisión.

Existen diversas razones por las que el tablero de instrumentos podría encenderse. Entre estas se encuentran las bujías incandescentes quemadas. Sigue leyendo el siguiente artículo para descubrir qué son estas herramientas y por qué tienden a sufrir este tipo de accidentes.

¿Qué es una bujía incandescente?

Antes de explicar la definición, es necesario aclarar la existencia de dos tipos de combustión interna. Los camiones que cuentan con motores diésel usan bujías incandescentes. Por el contrario, aquellos que posean motores de gas usarán las convencionales.

La principal diferencia entre ambos radica en la compresión para elevar la temperatura del aire a un nivel que permita que el diésel se queme automáticamente. A medida que el pistón se eleva en el cilindro, la presión incrementa. Esto hace que la temperatura se intensifique de manera sostenible.

Cuando el pistón alcanza la parte superior del cilindro, se obtiene la presión necesaria para provocar la combustión. Si el motor está frío, la compresión por sí sola no es adecuada para la combustión. Aquí es donde entra en juego la bujía incandescente. Esta resuelve el problema al agregar el calor necesario para que el procedimiento se lleve a cabo correctamente.

Durante los climas fríos, los motores diésel carecen del calor necesario para arrancar y requieren de ayuda adicional. Asimismo, el cilindro frío y la entrada de aire reducen la posibilidad de que se produzca la combustión. El cilindro frío y la entrada de aire reducen la posibilidad de que la combustión pueda efectuarse.

Siendo así, las bujías incandescentes son aquellas encargadas de suministrar energía adicional para lograr que el camión funcione adecuadamente. Para esto, deben calentarse a 1400 grados. Este procedimiento optimiza la combustión, reduciendo el humo.

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¿Por qué se queman las bujías incandescentes?

Un posible daño en una bujía incandescente se puede percibir simplemente por su apariencia. En base a cómo se ve, se pueden determinar diversos errores, como el sobrecalentamiento. Este puede deberse a lo siguiente:

• El tiempo de inyección o el patrón de pulverización no están configurados adecuadamente.
• La inyección de una cantidad incorrecta de combustible.
• El aceite se infiltra en la cámara de combustión.
• De igual manera, es necesario aclarar que el alto voltaje o sobrecalentamiento puede ser causado por un controlador que está empezando a fallar. Además, en caso exista un cableado defectuoso, es posible que las bujías reciban energía todo el tiempo, lo cual es perjudicial porque podrían llegar a quemarse prematuramente.

Otra razón por la que una bujía incandescente puede quemarse es si esta es conectada a una fuente de alimentación auxiliar. Esta clase de métodos es muy peligrosa y puede causar graves lesiones y quemaduras. La instalación incorrecta puede no solo dañar la bujía, sino también el motor. El reemplazo y prueba de estos artefactos siempre deben ser realizados por técnicos capacitados. Esto debido a que tienen mayor conocimiento sobre el tema y cuentan con el equipo adecuado para realizar el trabajo.

Ten en consideración que, si bien los motores diésel pueden funcionar incluso si una bujía incandescente está defectuosa, es posible que exista una mayor emisión de contaminantes. De la misma forma, existe la probabilidad de que al camión le cueste más arrancar.

Al ser conductor, lo más probable es que no notes estas señales a menos que estas se manifiesten a simple vista o sepas interpretarlas. Si tu camión no es revisado y diagnosticado con prontitud, habrá una sorpresa desagradable una vez que el clima se vuelva frío y el calor empleado para que el motor diésel funcione sea insuficiente.

Una manera de predecir si el motor presenta daños más severos es determinando el color del humo. El humo negro es causado por un desequilibrio en la relación aire-combustible, por ejemplo. Las bujías incandescentes defectuosas pueden perturbar el sensible proceso de combustión del diésel, lo que a su vez puede provocar que el motor produzca humo negro por el tubo de escape.

Las bujías incandescentes necesitan un cuidado especial. Es necesario supervisar constantemente que estas estén funcionando bien. De lo contrario, tu camión podría sufrir una serie de daños conforme lo uses, lo que podría ser perjudicial para ti.

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