Revisar y limpiar tus neumáticos con regularidad es un trabajo importante que te ayudará a aumentar la vida útil de estos componentes y mejorar tu seguridad mientras conduces a través de la ciudad o la carretera. Además de mejorar la estética de tu camión de carga, mantener limpios tus neumáticos ofrece algunos beneficios, por lo que es una tarea que vale la pena emprender con frecuencia.
Para aprender más sobre el cuidado de los neumáticos, no te pierdas este artículo que tenemos para ti en FUSO.
Los neumáticos sucios pueden ser más dañinos de lo que parecen, por lo que es importante que los limpies con regularidad. Si no se cuidan, los neumáticos pueden deteriorarse a causa del polvo de los frenos, lo que puede provocar daños en los neumáticos y ruedas, y picaduras en la superficie.
Cuando las pastillas de freno están en acción, el calor y la presión pueden hacer que se desgasten, lo que genera polvo y tierra. Estos pueden adherirse a la rueda y, si no se limpian, estas partículas se oxidarán y corroerán, provocando daños irreparables.
La limpieza de los neumáticos también te brinda la oportunidad de encontrar y eliminar cualquier cuerpo extraño. Esto incluye piedras, arenilla u otros desechos, que pueden estar en la superficie del neumático. Quitar estos objetos extraños antes de que entren en la carcasa del neumático y causen daños reales podría salvarte de una situación potencialmente peligrosa o costosa.
La limpieza adecuada de los neumáticos de tu camión es sencilla, asequible y se puede realizar fácilmente en casa. Revisa estos consejos para conocer la forma más eficaz de lavarlos:
Al limpiar tu camión, primero debes lavar las llantas con un cubo de agua aparte. Esto te ayudará a evitar esparcir la suciedad y la mugre que acumulan los neumáticos en la pintura de tu vehículo. También debes utilizar cepillos y esponjas diferentes a los que utilizas en el resto de la carrocería.
Asegúrate de tener un cepillo para neumáticos, un paño de microfibra y una esponja aparte para limpiar tus neumáticos. Para aquellos lugares de difícil acceso alrededor de las aleaciones, puedes usar un pincel suave. Puedes invertir en una solución de limpieza específica para neumáticos, ya que esto ayudará a eliminar la tierra y el polvo de los frenos y podrás limpiar con mayor facilidad.
Recubre tus llantas y ruedas con una solución de limpieza de llantas y déjalas reposar durante el tiempo especificado en el empaque del producto. Luego, remueve la suciedad y la mugre de los neumáticos con un cepillo especial para esta zona. Asegúrate de pasar por todas las grietas de tu neumático.
Con agua fría limpia, debe enjuagar los neumáticos y las ruedas para garantizar que todo el producto de limpieza se elimine. Después de enjuagar, no olvides secar tus ruedas con un paño de microfibra limpio. Si no lo haces, corres el riesgo de que las ruedas se oxiden, lo que puede provocar más daños.
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Mientras limpias tus neumáticos, también debes inspeccionarlos visualmente para detectar cualquier signo de daño. Debes estar consciente de encontrar los siguientes daños:
Mientras revisas tus neumáticos, también debes medir la profundidad de la banda de rodadura y verificar que estén correctamente inflados.
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Cada parte de tu camión de carga es una pieza importante de un rompecabezas complicado y el alternador no es una excepción, ya que es un componente crucial para el funcionamiento de tu vehículo.
De hecho, sin el alternador funcionando a su capacidad óptima, el sistema eléctrico dentro de tu unidad podría fallar. Un problema con el sistema eléctrico puede causar daños generalizados y costosas reparaciones y reemplazos. Si te interesa conocer los síntomas de un alternador dañado, continúa leyendo la siguiente nota que tenemos para ti en FUSO.
El alternador es un generador de energía eléctrica dentro de tu camión. Es un componente importante que suministra electricidad, ya sea para arrancar y hacer funcionar tu vehículo, así como para satisfacer todas las diversas necesidades eléctricas dentro de este.
Si bien las baterías pueden tener enormes capacidades, eventualmente los faros, la radio, las luces interiores y el sistema de infoentretenimiento consumirán toda la energía. Pero para ello, el alternador se encargará de recargarla mientras el vehículo está en marcha convirtiendo la energía mecánica en electricidad.
El alternador no requiere mucho mantenimiento; no obstante, el rotor, las escobillas y otras partes internas se desgastan con el tiempo, por lo que reemplazarlo es algo que todos los propietarios de camiones deben llevar a cabo eventualmente.
Los siguientes síntomas te ayudarán a tener una visión más amplia de lo que podría pasarle a un alternador.
Es muy probable que tu camión esté equipado con una luz indicadora de advertencia en el tablero con las letras «ALT» o «GEN». Este es a menudo el primer indicador de que el alternador está fallando, por lo que no debes ignorarlo incluso si no experimentas otros síntomas.
Si este es tu caso, lleva tu unidad a un taller de servicio automotriz confiable para un diagnóstico completo y saber la fuente real del problema.
El segundo síntoma de alternador dañado son unas luces atenuantes en el tablero y faros delanteros, las cuales se atenúan mientras tu camión está en ralentí, pero se vuelven más brillantes cuando el motor está encendido. El problema podría deberse a un alternador débil, pero una batería que se está agotando también podría ser la razón.
Recuerda que el alternador se encarga de proporcionar energía a los faros, por lo que el parpadeo generalmente significa que está luchando por funcionar como debe de ser.
Cuando el alternador está fallando, otros sistemas que funcionan gracias a él pueden dejar de trabajar. Estos pueden incluir ventanas eléctricas, seguros eléctricos, luces de la cabina, luces del tablero, aire acondicionado e incluso la radio de tu camión. Puede que las causas de estos problemas sean otros, pero para descartarlos, será necesario llevar tu unidad a un servicio de reparación para una revisión general.
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Aunque los ruidos extraños suelen ser las causas de muchos problemas, a veces la falla del alternador puede provocar que algunos de los cojinetes fallen en el motor, creando traqueteos inusuales. Por otra parte, las correas serpentinas, conocidas como las correas de transmisión, también pueden desgastarse con el tiempo y no estarían cumpliendo su rol de girar las poleas del alternador de forma eficaz, lo que provoca una falta de carga y una serie de chirridos.
En estos casos, el alternador podría ser el culpable, especialmente si ocurren algunos de los síntomas anteriormente enumerados.
Tu camión no solo funciona con gasolina o diésel; también se mueve gracias a la electricidad. ¿Sabías que el alternador proporciona energía a las bujías que encienden tu motor? Cuando este componente está fallando, es posible que no haya suficiente potencia en las bujías para mantener vivo tu motor, lo que puede causar que te detengas sin motivo alguno mientras tu vehículo está en funcionamiento o que tengas problemas para arrancar.
Obviamente, las baterías a veces fallan por sí solas, pero un alternador defectuoso puede hacer que esta se descargue debido a la falta de recarga. Por ejemplo, cuando el alternador deja de funcionar correctamente, la batería toma su lugar y comienza a brindar energía eléctrica al sistema de tu vehículo de carga pesada.
Debido a que las baterías no están diseñadas para un uso energético prolongado, incluso las mejores se agotarán eventualmente, dejándote varado en la entrada o peor aún, al costado de la carretera.
Si tu batería se agota, haz que revisen el alternador cuando la reemplaces para que no sufras ningún tipo de inconveniente en el futuro.
Si no estás seguro de si tu alternador está funcionando a su máxima capacidad, tendrás que realizar algunas pruebas en la pieza para ver si está dañada, qué tan grave es el daño y cómo repararlo. La forma más fácil es usando un voltímetro, pero lo recomendable es llevar tu camión a un taller de servicio y realizarle una revisión exhaustiva.
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Conducir de manera segura durante el invierno no solo implica que sigas las mejores prácticas de manejo mientras estás detrás del volante, también es necesario que tu unidad reciba el mantenimiento adecuado y se prepare para las temperaturas extremas.
Entonces, ¿cómo debes cuidar tu vehículo si viajarás por zonas muy frías? El mantenimiento de camiones durante el invierno requiere algunos pasos que no puedes pasar por alto para así garantizar que todo funcione correctamente. Después de todo, encontrar una falla a mitad de un viaje o antes de salir a uno es un dolor de cabeza que querrás evitar a toda costa.
Con ello en mente, en el siguiente artículo de FUSO, líderes en la venta de camiones, te compartiremos algunos consejos para el cuidado correcto de tu unidad de carga pesada en el invierno.
Antes de emprender tu próxima entrega, asegúrate de que se sigan los consejos a continuación durante tu plan de mantenimiento preventivo:
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La lista de verificación anterior te ayudará a mantenerte seguro este invierno mientras viajas por las carreteras. Recuerda que tu rutina regular debe modificarse para garantizar que tu conducción transcurra sin problemas. ¿Qué hay de ti o de tus conductores? Durante los meses de invierno, desearás que los conductores de flotas estén seguros, cálidos y cómodos en la cabina.
Es por ello, que también debes verificar el funcionamiento del sistema de calefacción y equipar cada camión de carga con un equipo de emergencia que contenga agua, bengalas de carretera, un extintor, triángulos reflectantes, una manta, cables de puente, etc. Estos artículos serán de gran ayuda en caso la batería falle o algo salga mal. Asimismo, es recomendable que tengas un raspador de hielo, cadenas y otros artículos esenciales para el invierno dentro de tu camión.
El invierno puede ser un gran desafío para los operadores y conductores de flotas, pero hasta los cambios más pequeños en tu preparación para los climas fríos mantendrá tus vehículos funcionando sin problemas.
¿Estabas conduciendo cuando de repente tu vehículo se apagó? Este problema puede surgir en cualquier momento y sin previo aviso. Recuerda que, al comprar un camión de carga, por ejemplo, será tu responsabilidad cuidarlo, es decir, verificar continuamente si tienes el nivel suficiente de combustible y agua en tu vehículo, entre otros puntos, para asegurarte de que tu unidad se mantenga en buenas condiciones durante mucho tiempo.
Tener conocimientos básicos sobre tu vehículo puede ayudarte a contrarrestar un problema mecánico como el hecho que se apague mientras está en funcionamiento. Para ayudarte con este problema, en el siguiente artículo de FUSO, vamos a discutir las principales razones del porqué se apaga un vehículo en marcha.
El problema más común cuando un vehículo se apaga de la nada mientras conduces es un sensor de posición del cigüeñal defectuoso. Este sensor es una parte necesaria para que el motor de tu unidad funcione.
Una bomba de combustible tiene la responsabilidad de suministrar al motor la cantidad correcta de combustible. Si esta no proporciona la cantidad correcta, entonces el motor se apagará por completo y quedará varado durante horas. En estos casos, las únicas soluciones serán reparar o comprar una bomba nueva.
Un experto deberá determinar si este es el verdadero problema o si se trata del filtro de combustible. Un filtro de combustible es un componente pequeño cuyo único trabajo es limpiar el combustible que ingresa al motor. Si este se obstruye, el combustible que ingresa al sistema será insuficiente y el motor se apagará.
Otro problema podría ser una línea de suministro de combustible con fugas. La gasolina o el diésel se transfieren al motor desde el tanque de combustible a través de las líneas de suministro. Si estas se rompen o están obstruidas por alguna razón, tu motor se apagará completamente mientras está funcionando.
Si conduces sin tener en cuenta el indicador de combustible, existe una probabilidad de que se te acabe el combustible y te quedes varado al costado de la carretera. Por lo tanto, antes de iniciar cualquier viaje, deberías verificar tu medidor de combustible.
Si tienes suficiente combustible para conducir, ¡perfecto!, pero si tu indicador de combustible se ha averiado y no muestra el nivel real de combustible, podrías tener un gran problema. Si tu indicador de combustible muestra que tienes suficiente combustible, pero aún así tu vehículo deja de funcionar, debes visitar a un mecánico.
El alternador es responsable de administrar el suministro de electricidad a tu vehículo. Si tu unidad deja de funcionar repentinamente, es posible que el alternador ya no sirva. Un alternador defectuoso cortará el suministro de energía a los componentes vitales. Si esta es la causa, notarás que las luces se apagan en el tablero o que el motor pierde potencia repentinamente.
Afortunadamente, un alternador falla con el tiempo y te darás cuenta poco a poco si algo anda mal con este elemento. Además, los alternadores son componentes eléctricos que un mecánico calificado puede reparar fácilmente por lo que tendrás una solución rápida.
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Muchos vehículos están equipados con una ECU, que es una pequeña computadora que dirige los diversos sistemas y funciones del vehículo. Si hay algún problema con la ECU, puedes perder energía. Por lo general, cualquier problema relacionado con este componente se mostrará al iluminarse la luz del Check Engine del tablero.
Una vez que se enciende esta luz, es tu trabajo llevar tu vehículo al mecánico más cercano para recibir un diagnóstico adecuado. Si sigues ignorando esta luz, su vehículo seguirá desarrollando problemas y se apagará mientras conduces.
El sistema de encendido del automóvil suministra energía al motor para que funcione. Si el sistema falla, tu motor se detendrá abruptamente. Lo primero que debe hacer es intentar girar las llaves nuevamente. Si eso no enciende el motor, entonces definitivamente está experimentando una falla en el sistema de encendido.
Es posible que se trate de un componente pequeño como un relé de encendido estropeado. Los relés son bastante pequeños, pero tienen un trabajo importante de controlar la cantidad de electricidad que pasa a través de ellos.
Es importante que ante cualquier problema que tu vehículo tenga, visites a un mecánico de inmediato para evitar que estos se agraven.
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Mantener tus vehículos en buen estado y a tus conductores seguros en la carretera es esencial para lograr los objetivos de ventas y servicio de tu empresa. Entonces, ¿qué puedes hacer para mantener tu flota en un óptimo estado? Si tienes una flota de camiones y estás interesado en una buena gestión del mantenimiento preventivo para poder continuar con tu negocio, no te puedes perder el siguiente artículo que FUSO tiene para ti. Usa esta lista de verificación para mantener y cuidar tus vehículos y así tengan una mayor vida útil.
El mantenimiento de flotas es la aplicación de una rutina u horarios de mantenimientos, así como el proceso de cuidado de tus vehículos. Este programa ayuda a mantener seguros tanto a los vehículos de la flota como a los conductores, lo que a su vez permite que tu negocio se mantenga rentable.
Como administrador de flota, tus necesidades pueden estar creciendo: a medida que la tecnología se vuelve más sofisticada en todos los segmentos de clase de vehículos, sus piezas son cada vez más complicadas y costosas. En algunos casos, las piezas tardan más en ser reparadas o requieren la necesidad de diagnósticos electrónicos. Combinado con la escasez de técnicos calificados, todo esto significa que las reparaciones pueden ser difíciles de manejar en la era moderna.
Sin embargo, a pesar de que es una parte tan crítica de tu negocio, puedes simplificarla al estar al tanto de tus vehículos regularmente y conociendo los dos tipos de mantenimientos para flotas:
Si cuidas correctamente tus vehículos, podrás reducir las reparaciones no programadas y el tiempo de inactividad. Cuando desarrolles el plan de mantenimiento de su flota, realízate estas cinco preguntas:
Adicionalmente, el mantenimiento preventivo debe incluir los siguientes puntos y componentes:
Desarrolla un programa de mantenimiento preventivo que funcione para tu flota. Los kilómetros recorridos, las horas en los que el motor permanece activo, el uso de combustible, el tipo de trabajo que se realiza y el tiempo entre revisiones las guías típicas que se utilizan para crear un cronograma de este tipo.
Al contabilizar también el número de averías, reparaciones de emergencia, entre otros, es posible que veas patrones que requieren ajustes en la rutina.
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Es importante estar al tanto de las tareas que enfrentará cada vehículo. Tómate el tiempo para describir el uso que le darás a cada camión, ya que al hacerlo, podrás reducir los costos de tu empresa. Al adquirir una unidad con las especificaciones erróneas, es decir, sin tomar en cuenta el uso y la carga transportada, puede generar problemas de mantenimiento en el futuro, los cuales podrían afectar el presupuesto de tu empresa.
Antes de comprar un camión, bus u otro tipo de vehículo para el objetivo y los servicios de tu empresa, consulta con los fabricantes sobre qué unidad se ajustaría más a tus necesidades. Considera el uso, las condiciones de operación, lo que se transportará, etc.
Tus conductores son la primera línea de defensa contra averías y reparaciones inesperadas. Al capacitar e incentivar a que los conductores completen las inspecciones diarias del vehículo, incluidas las verificaciones previas y posteriores a un viaje, podrás abordar los problemas mientras aún sean menores.
De esta manera, ayudarás a evitar reparaciones costosas en el futuro. Recuerda que es fundamental que ellos te avisen de inmediato cualquier problema que tenga un vehículo.
Probablemente escuchas sobre la importancia de la presión de los neumáticos todo el tiempo, pero a menudo muchos conductores u operadores de vehículos pasan por alto este aspecto importante del mantenimiento. La presión de los neumáticos afecta la experiencia de manejo, el desgaste de las ruedas y el consumo de combustible. Todo lo anterior puede afectar la seguridad del vehículo y del conductor.
Del mismo modo, también se pasa por alto el efecto de la temperatura del aire sobre la presión de los neumáticos con los cambios de temporada. Es por ello que debes inculcar la importancia de controlar y mantener la presión de los neumáticos de todos tus vehículos con tus conductores.
Minimiza el tiempo de inactividad, mejora la satisfacción del cliente y optimiza la productividad de tu empresa al llevar a cabo una buena gestión del mantenimiento de flotas.
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Ya sea que te dediques al transporte de mercancías con tu camión de carga o al transporte de pasajeros con un bus, puede que hayas tenido que cesar tus actividades de negocios debido a la crisis de salud que está viviendo en el país.
Al igual que las personas que hoy en día están acurrucados en casa, los camiones, buses y otros vehículos que pasarán a estar inactivos por un periodo largo de tiempo deben prepararse como es debido, ya que, en los vehículos automotrices, la falta de uso regular puede ocasionar muchos problemas.
Nuevo o viejo, cuando tu vehículo no está acumulando kilómetros, aún necesita mantenimiento regular y al menos atención ocasional para evitar que los problemas se agraven cuando lo devuelvas a la carretera.
En el siguiente artículo de FUSO, hemos recopilado algunos consejos sobre cómo cuidar tu vehículo que te ayudarán a mantenerlo en la mejor forma mientras permanece inactivo por varias semanas.
Revisa la presión de tus neumáticos con regularidad para asegurarte de que coincidan con las recomendaciones del fabricante. Recuerda, las llantas pierden aire con el tiempo y pueden quedar planas si tu vehículo no se ha movido por más de 30 días (dependiendo del compuesto y la construcción de estas).
Debido a esto, considera mover tu vehículo ligeramente hacia adelante o hacia atrás cada 2 o 3 días para prevenir que las llantas se deformen. También puedes quitar algo de peso de las ruedas utilizando algún dispositivo apropiado, como los soportes de gata.
Si tus neumáticos ya son viejos, presta especialmente atención al deterioro, el agrietamiento, la formación de escamas, el abultamiento o la decoloración. De cualquier manera, inspecciona cuidadosamente las llantas antes de sacar tu vehículo nuevamente a la carretera.
Para evitar una batería descargada, deberás encender tu vehículo una vez por semana y dejarlo funcionar durante unos 5-10 minutos. Si tu camión o bus está estacionado en un garaje, asegúrate de hacerlo con la puerta y ventanas abiertas para garantizar una ventilación adecuada de los gases del tubo de escape.
Por otra parte, también puedes optar por retirar la batería. En este caso, deberás untar vaselina o grasa de petróleo en los terminales y los extremos del cable para evitar crear oxidación. Guarda la batería en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa.
Uno de los principales problemas de dejar un vehículo inactivo es la oxidación en el interior del tanque de combustible. La mejor manera de evitar esto es llenar el tanque hasta el borde con combustible de calidad e incluso agregar algunos aditivos. Esto evitará que entre humedad al tanque y evitará la oxidación. Por supuesto, asegúrate de que el tanque también esté sellado correctamente.
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Cuando no conduces tu vehículo, se puede formar óxido en los rotores de los frenos, especialmente si está estacionado afuera y expuesto a los elementos de la naturaleza. Es solo cuestión de días para que se forme una capa de corrosión, la cual podrás ver acumulándose a simple vista.
Cuando conduzcas, este óxido puede entrar en el forro de las pastillas de freno y provocar ruido, un frenado desigual y pulsaciones en el pedal de freno. Sin embargo, si puedes encender y mover tu vehículo una vez por semana, puedes minimizar la acumulación de óxido.
Al estacionar tu vehículo y dejar activado el freno de estacionamiento también puede crear problemas, ya que al estar por mucho tiempo así, podría haber dificultades para soltarlo. Al igual que los frenos normales de tu vehículo, puedes mantenerlo en buenas condiciones de funcionamiento mediante el uso regular.
El hecho que no conducirás debido a la orden de aislamiento social no significa necesariamente que debas retrasar tu intervalo de cambio de aceite. Si un vehículo estará inactivo, el aceite igual se deteriorará debido a las fluctuaciones de temperatura.
Si te preguntas cuánto tiempo puede pasar entre los cambios de aceite cuando no alcanza el intervalo de kilometraje, consulta el manual del propietario para conocer con exactitud el tiempo del cambio de aceite.
Otras sugerencias que deberías seguir para mantener tu vehículo en buen estado al estar inactivo son:
A pesar de que lo más importante que puedes hacer en este momento para cuidar tu vehículo es conducirlo, por ahora no es lo correcto. Seguir los pasos anteriores puede ayudarte a garantizar que tu camión o bus estén listo para funcionar para cuando se pueda volver a conducir con mayor libertad.
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Ya sea que acabes de comprar un camión nuevo o estés manejando una unidad antigua, los cambios de aceite de motor son una parte importante del mantenimiento de rutina y no puedes ignorarlos. Si lo haces, no sabes qué problemas mecánicos podrías provocar.
En el siguiente artículo de FUSO, te mencionaremos algunos de los beneficios de cambiar el aceite de motor para que así puedas entender la gran importancia del reemplazo de este fluido.
Cuando el aceite fluye hacia el motor desde otras áreas, comienza a mezclarse con polvo y otras partículas que puedan haber dentro de él, contaminándose poco a poco. Además, debido a que el aceite debe moverse a través de todo tu vehículo, terminará ensuciando no solo el interior del motor.
Aquellos conductores que viajan por lugares más secos o trabajan en terrenos polvorientos tendrán más suciedad con la que lidiar. Si cambias el aceite y reemplaza los filtros de manera oportuna, eliminarás los desechos antes de que causen daños.
El aceite es un elemento vital de tu camión: no solo lubrica tu motor y otras partes importantes, también los protege del desgaste y los daños. El problema es que el aceite, con el tiempo, se ensucia.
Al garantizar el cambio de aceite y filtro de motor de acuerdo con las especificaciones del manual del propietario, mantendrás este componente limpio y protegido. Podrás ahorrar tiempo, dinero y estrés al cuidar tu camión, además de tenerlo operativo por muchísimo más tiempo.
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¿Si cambio el aceite de mi camión a tiempo, tendré un mejor rendimiento de combustible? ¿Cómo funciona? Los kilómetros totales por galón se ven afectadas por una serie de factores que incluyen el medio ambiente, el terreno, tus hábitos de manejo y el mantenimiento que le das a tu camión.
Sin un mantenimiento adecuado, toda la suciedad y la arena de las que hablamos anteriormente se acumularán dentro de tu motor causando fricción. Esto provocará que tu motor trabaje más de lo normal, disminuyendo su rendimiento y la economía de combustible.
Existen límites máximos de emisiones cuando se trata del cuidado del medio ambiente. Para respetarlos, debes reducir la cantidad de hidrocarburos que tu camión emite hacia la atmósfera.
Si no cambias el aceite sucio de tu camión, este fluido provocará una acumulación de estos hidrocarburos dentro de las áreas de la caja del cigüeñal del motor. Estos luego se quemarán, causando que una mayor cantidad de estas partículas sean liberadas al aire a través del tubo de escape.
Como te lo mencionamos, reemplazar el aceite a tiempo no solo te ayudará a mejorar el rendimiento de tu motor, también te permitirá respetar las normas ambientales.
Con el tiempo, el aceite viejo de tu camión empezará a descomponerse debido a la exposición al calor. Poco a poco irá perdiendo su viscosidad y su capacidad para lubricar las paredes del cilindro del motor.
Cuanto más sucio está el aceite, más difícil es que cumpla con su función principal. El lodo y el polvo, mezclado con aceite, se acumularán y bloquearán el flujo hacia las partes que necesitan lubricación. Esto provocará que tu motor se sobrecaliente. Y no querrás que eso suceda, ¿no es así?
Al no cambiar el aceite, tu motor funcionará de manera menos eficiente y sin la potencia que necesitas para el transporte de carga pesada.
¿Cada cuántos kilómetros se cambia el aceite? No hay un número exacto, pero se recomienda reemplazarlo cada 15 000 o 20 000 Km. Ten en cuenta que esto dependerá en gran medida de tus habilidades de manejo y las zonas en las que sueles trabajar con tu camión.
Además de todos los beneficios que te hemos mencionado, el servicio de mantenimiento preventivo también es una gran oportunidad para que se revisen otras áreas de tu camión.
En todos los centros de servicio de FUSO, el cambio de aceite es un servicio rápido y simple. Así que ¿por qué no revisar tu camión por completo de paso? Asimismo, nuestro personal totalmente capacitado y certificado estará aquí para brindarte los mejores consejos de cuidado y mantenimiento con el fin de aumentar la vida útil de tu camión.
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